Relato parto en casa María Andrea & Tiago

parto en casa Bogotá
Gus y yo estábamos convencidos de que la mejor bienvenida que podíamos ofrecer a nuestro primer hijo sería en nuestra casa. No queríamos intervenciones innecesarias, ni la presencia de personas desconocidas. Tener una visión compartida sobre el parto nos llevó a buscar el mejor equipo para hacer realidad nuestro ideal y estamos felices de haber escogido el acompañamiento de LUA.
Por mi parte yo quería vivir mi parto en libertad y así lo hice. Yo parí a mis anchas, bajo mis reglas, escuchando y sintiendo, siendo la protagonista, siguiendo mi instinto mamífero y mi intuición femenina. Estaba en mi ambiente, con luces bajitas, velas, con el calor de la chimenea, con música, mantras, aromas relajantes, y en compañía de la persona mas importante: mi esposo, con la presencia de nuestras perritas y gata, y el apoyo de 2 parteras y mi doula que me cuidaron con dulzura sin intervenir en el proceso.
Tiago nació el 24 de diciembre en piscina de agua en la casa, después de 40 horas de parto, de las cuales 16 de parto activo en las que estuve oscilando entre el movimiento y la quietud, recibiendo cada contracción según como mi cuerpo se sentía cómodo, no tomé ningún medicamento para aliviar el dolor, por el contrario ingerí alimentos y me hidraté tanto como mi cuerpo me lo pidió.
Parí convencida de que sabría parir, que mi hijo sabría nacer y que Dios ha dispuesto en cada mujer toda la fortaleza necesaria para dar a luz y traer al mundo estos angelitos guiadas por el amor y la sabiduría divina.
Ese momento de recibir a Tiago con mis propias manos y traerlo hacía mi pecho sin tiempo límite, sabiendo que llegó a este plano en completa paz y tranquilidad, totalmente sano y yo íntegramente perfecta, fue mi mejor iniciación como madre cuidadora y protectora; fue sin duda el mejor nacimiento que podía ofrecerle a mi hijo y una experiencia de transmutación hacía una Maria Andrea mejor en todos los aspectos mental, físico, emocional y espiritual.
Brindo por millones de nacimientos divinos para todos los angelitos y por mujeres empoderadas pariendo según sea su deseo interior!
Maria Andrea Giraldo
Parto en casa Bogotá
Diciembre 2021

PARTO NATALIA & CELESTE

Parto en casa

Celeste nació en casa rodeada de amor, apoyo, confianza y fuerza interior, recibida por su padre, contenida por mamá y rodeada de la energía de Amapola, Paloma y Juana quienes nos guiaron durante 5 meses, enseñándonos la maravillosa magia del embarazo, el parto y la lactancia, la cual no siempre es fácil. LUA nos hizo fuertes en esta etapa por medio de la enseñanza. El trabajo que realizan es una verdadera revolución, pues ellas muestran la maternidad como ES, una fuerza natural y poderosa de la mujer que trasciende, involucrando a los hombres como complemento perfecto de transformación. La maternidad no es dependencia, debilidad, sumisión, la maternidad es fuerza, cambio y vigor, y es netamente femenina. LUA reivindica lo que nos han quitado, el poder que significa parir.

Natalia y Andrés

Parto en casa Bogotá
Diciembre 2021

Parto en casa Fernanda & Olivia

Parto en casa Bogota

Parto en casa después de un primer parto impactante (dentro de la institución)

Llegamos a LUA temerosos de un segundo parto, pero con el anhelo de hacer las cosas de una manera diferente, hoy podemos decir que fue una experiencia sanadora para todos como familia, que nos permitió cambiar muchos paradigmas sobre el parto en casa, entendiendo que es una forma segura y completamente respetuosa de parir. Deseamos que más mujeres se den la oportunidad de parir de forma respetada y se animen a empoderarse de su cuerpo, como lo leímos alguna vez: ¡parir de forma fisiológica empodera a la mujer! 

En todo el proceso de acompañamiento a la gestación de la mano de Amapola y Paloma fuimos obteniendo la información necesaria para sembrar la confianza y seguridad , logrando disipar los temores  con los veníamos gracias a todo esto tomamos la decisión de un parto en casa planificado.

Sin duda la mejor decisión que pudimos tomar, fue un segundo parto muy amable con el cuerpo, sin ninguna intervención médica innecesaria, en la privacidad de nuestro hogar, y  donde como familia pudimos vivir la llegada de Olivia, incluyendo la compañía de nuestro hijo mayor que pudo ver nacer a su hermana (pudimos gracias al apoyo del equipo de LUA involucrarlo en todo el proceso desde la gestación hasta el parto),  no menos importante tuvimos un posparto más tranquilo, con una recuperación física muy rápida, llenos de vitalidad e información y con el apoyo del equipo completo de LUA.

Sin duda el acompañamiento de LUA en este proceso fue una experiencia mágica y sanadora, centrada en Mamá y bebé pero a la vez involucrando a toda la familia para ser parte de todo el proceso.

Son un equipo muy profesional pero a la vez muy cercanas y amorosas. Agradecemos profundamente la labor de las parteras en especial la de Paloma y Amapola por su vocación en cambiar la forma cómo nacen los bebés.

Familia Celis Hurtado.

Parto en casa Bogotá
Octubre 2021

Catherin, Olivia & Fernando

Nos pareció importante tener el acompañamiento de LUA porque a pesar de ser mujer, siento que la gestación no es un tema que se nos enseña. Los talleres que ofrecen están muy completos y aprendimos que debemos confiar más en nuestros instintos. Aprendimos lo que es un parto respetado y cómo lograrlo. Que todo es válido siempre y cuando sea con nuestro consentimiento. Me hicieron sentir que podía parir, y parir como yo quería. 

Amapola y Paloma siempre estuvieron dispuestas a responder mis dudas, a aportar soluciones naturales a mis malestares. Incluso en el posparto fueron muy consentidoras con masajes y dando mucho apoyo emocional. Incluso ahora crearon una comunidad de mamás lactantes, un espacio para compartir la maternidad. 

Fue una experiencia agradable y nutritiva. Aplaudo la labor que hacen y espero que puedan seguir creciendo y llevar sus conocimientos cada vez a más mujeres.

Catherin Braca
Acompañamiento global al parto en clínica
Septiembre 2021

Adriana, Joaquín & Juan

Familia Adriana & Juan Pablo

El acompañamiento de LUA durante la gestación y posparto de nuestro hijo fue un regalo en nuestra vida lleno de luz, desde la pedagogía, orientación, sabiduría, intuición y amor, LUA nos dio muchos elementos que nos ayudaron a formar nuestra identidad como padres, contamos con muchas herramientas de crianza que han sido estructurales para cuidar de la mejor manera la salud de nuestro bebé, para estimularlo de manera adecuada y brindarle los mejores cuidados, especialmente cuando era recién nacido.

Además de esto en LUA hemos encontrado una comunidad que nos acompaña y fortalece permanentemente como padres y a nuestro hijo, por lo que después de varios meses de nacido de nuestro hijo, aún contamos con el acompañamiento de LUA.

Adriana Sandoval
Acompañamiento gestación y posparto
Mayo 2021

Relato parto en casa Laura & Ainara

Parto en casa Bogotá

Si tuviera que describir mi experiencia con LUA en una sola palabra esa sería “Plenitud”, en todo el sentido de la palabra:

Para comenzar, estuve plena y consciente de cada decisión que tomé, gracias a su acompañamiento y por supuesto a toda  la sabiduría que con amor y dedicación compartieron para brindar total soberanía sobre mi cuerpo. También disfruté cada momento de la gestación, ya que,  fueron una guía durante esta gran metamorfosis, así que no me sentí abrumada ante tantos cambios, al contrario los admire a cada uno de ellos.

Al  gran evento del parto llegue tranquila, segura de mi y nuestra bebé, por  todo el camino recorrido con Amapola y Paloma logré entregarme absolutamente a esa sabiduría mamífera, irracional pero supremamente intuitiva, la cual me dio toda la voluntad y fuerza de surfear cada momento de intenso dolor, asumiéndolo con mucho amor y paciencia; de igual manera agradeciendo y aprovechando los momentos de descanso entre cada contracción. Así que por supuesto fue absoluta plenitud en cada célula de mi cuerpo habitando el momento presente.

Y por último durante el posparto tuvimos toda la contención y cuidados de LUA para estar en  total  recogimiento para tomar fuerzas y proteger este momento tan frágil y emocionante. Para nuestra familia, parir en casa ha sido la oportunidad de encontrar un entorno seguro, digno e íntimo, en otras palabras un lugar realmente humano. Esta fue desde el inicio la mejor decisión que tomamos para el bienestar de nuestra hija y de nosotros.

Ese día fuimos protagonistas de este gran evento, el más importante de nuestras vidas pues estuvo repleto de felicidad, abundancia y armonía. Este día logramos conectarnos profundamente con nosotros mismos,  con nuestras fortalezas y debilidades y así aprender de ellas para el camino a seguir, que es dar lo mejor de cada uno a este hermoso ser que comienza a vivir y entender el mundo.

El acompañamiento de una partera es mucho más que la mera praxis, no es solo el fin del alumbramiento, en realidad, una partera está en todo el proceso de profundo cambio por el cual una familia pasa, al decidir traer una vida al mundo. Es más, no solo está presente en este camino, también es una guía, una luz, un ser sanador, que en mi opinión ayuda a reconectar con el poder ancestral de crear vida, que habita en el ADN de cada mujer, por ende también conectar con el poder de enseñar y ser guía, con empatía, paciencia y muchísimo amor. La labor de una partera está ligada a dar comienzos sanos, a brindar cimientos para el resto del camino.

Por eso estamos completamente agradecidos y admirados por esta labor llena de fuerza y amor que realmente transforma pequeñas realidades y a su vez transforma el mundo en un lugar mucho mejor.

Laura Baratto, Sebastian & Ainara
Parto en casa Bogotá
Agosto 2021

Parto en casa María & Emiliano

Parto en casa bogotá
Parir en casa era un gran sueño para mí, desde antes de concebir nuestro bebé ya sabía que era lo que quería. Luego con mucho amor e información mi esposo fue considerando la idea y cuando comenzamos nuestro proceso con LUA fue una certeza para los dos: queríamos que nuestro hijo llegara a este mundo rodeado de amor y dulzura, en la tranquilidad de nuestra casa.
Fue un camino precioso preparar el nacimiento de nuestro hijo, con sus luchas que no fueron pocas (tutelas para hacer valer la licencia de maternidad, médicos que querían inducir el parto, comentarios, miedos, etc.) y con grandes alegrías.
Hubiera sido muy difícil, quizás imposible, recorrer este camino  sin el equipo maravilloso que estaba conmigo: Las chicas de LUA siempre ahí para acompañarnos en cada combate y cada victoria.
Al final esa sensación de alegría y plenitud que sentí en mi parto valió todos los esfuerzos y fue el regalo más bello que me di a mí misma y por ende que le di a mi familia.
María Florez
Parto en casa Bogotá
Agosto de 2021

Relato parto en casa Martha & Leticia

Parto en casa Bogotá

Antes de quedar embarazados sabíamos que queríamos parir en casa, aunque no conocíamos de nadie en Colombia que lo hubiese hecho así recientemente. Contacté a Amapola por recomendación de mi médico y un par de meses después sabíamos que ya estábamos en embarazo. A los 3 meses de gestación comenzamos el acompañamiento de LUA en plena pandemia, con talleres virtuales, citas en consultorio y sintiendo la presencia total de este equipo que día a día nos empoderaba mas con información y evidencia científica. Fue un tiempo en el que crecía la barriga y con ella crecía nuestra confianza despojándonos de miedos ajenos y alimentando nuestra reconexion interna, disfrutando de la contención, empatía, cariño y profesionalismo que nos ofrecía LUA. Fue un proceso armónico, fluido, que cada día resonaba más con nosotros. Tuvimos y reforzamos la certeza de que el parto era un acto fisiológico natural y que siempre tendríamos la posibilidad de ir a un hospital si así fuera necesario, aunque las probabilidades de no requerirlo eran muy altas.

Leticia escogió su llegada en la semana 38,3, en la madrugada del sábado 6 de febrero, en nuestra habitación de luz tenue, en libre movimiento, después de recibir 5 horas de contracciones aferrada a las manos de mi amor Juan David quien me cantó ininterrumpidamente el canto carnático, primero a solas y luego rodeados de Amapola, Paloma y Julieta. Así como todo mi embarazo, el parto fluyó con naturalidad y facilidad, sin ninguna intervención más que los abrazos, el apoyo y palabras a baja voz que me decían los 4 seres de luz que me rodeaban en ese momento mágico, salvaje, alucinante e indescriptible. El saco amniótico se asomó lleno de agua cristalina como a eso de las 3am, luego brotó el agua y a las 5:34am yo estaba en 4 apoyos en el piso sobre mi Mat de yoga, rodeada de mis parteras y mi amor; sonaba un coro de voces femeninas de fondo, un grito liberador mío pero no de dolor sino de conmoción e impulso final y las palabras de mis parteras dándole la bienvenida a una hermosa bebé, que aunque no sabíamos el sexo, en los últimos instantes antes del expulsivo comenzó a ser mencionada en femenino por las adivinas parteras. Después de su salida, la tuve inmediatamente entre mis brazos, le tomaron allí sus signos vitales, luego se deslizó mi placenta sin esfuerzo.

Minutos después nos recostamos en la cama los 3, Leticia se prendió de mi pecho y nuestras parteras nos consintieron como a la recién nacida familia que éramos, nos dieron el desayuno más rico del mundo, nos alistaron la placenta para ser consumida por mi en batidos deliciosos de frutas y proteína, me dieron un suero intravenoso vitamínico, revisaron que no hubiera rasgados vaginales, cortamos el cordón umbilical varías horas después del nacimiento con un ritual hermoso con una vela y palabras liberadoras, midieron, pesaron y revisaron lo reflejos de Leticia y hacia las 2pm nos dejaron solos con la casa perfectamente armónica, limpia y preparada para los días que venían. Nuevamente todo fluyó, sin expectativas, sin contratiempos, sin preocupaciones, sin horarios, con paciencia y algunas dudas que nos fue resolviendo poco a poco Leticia. Escogimos estar solos los 3 todo el tiempo de la cuarentena, sin ayudas externas, con nuestros dos perritos y con las visitas frecuentes de nuestras parteras quienes fueron guardianas de nosotros con el mismo amor de siempre. Nuestra familia respetó este tiempo de intimidad, cuidándonos a la distancia.

El nacimiento de Leticia fue mejor de lo que algún día imaginé y agradecemos una y mil veces haber escogido a LUA en la preparación y vivencia de nuestro momento más sublime y poderoso de la vida.

Martha Liliana Bonilla
Arpista
Parto en casa Bogotá
Febrero 2021