Celebramos las experiencias en hospitales, clínicas, parqueaderos, de camino a, al igual que celebramos nuestra experiencia en casa, bajo nuestras cobijas, con nuestros aromas para recibir un nuevo respiro, con comodidades que parecían banales pero que resultaron favorecedoras para el proceso del parto en general. En nuestro primer embarazo también queríamos que fuera en casa, desafortunadamente, no encontramos acompañamiento, por no vivir en la capital. No fue una experiencia compartida, se sentía que éramos un estorbo en un procedimiento ajeno a nosotros.
Para la segunda bebé nos decidimos encontrar el acompañamiento que nos hiciera sentir a salvo y como en casa. Después de preguntar, hablar, mudarnos a Bogotá y conversar con varias personas nos decidimos por parir junto a LUA. Fue una decisión acertada. Desde un principio nos hablaron de la importancia de establecer la relación jerárquica en sentido horizontal. Así recibimos respuestas honestas y no condescendientes a todas nuestras preguntas, dudas, miedos, desconocimientos y más.
El acompañamiento de LUA nos pareció completo, porque su red se extiende a pediatras, nutricionistas, enfermeras, más parteras, doulas y más; eficaz porque pueden leer entre líneas para detectar las palabras impronunciables; y sobre todo alternativo con deslumbres de la tradición oral de las abuelas porque la información de las clases viene atada con autonomía, con pensamiento constructivo, bajo un criterio científico actualizado, a veces con reconciliación con la Ley vigente que nos acoge para el servicio médico y de registro. Su acompañamiento se extiende hasta las charlas personales, hasta los consejos y las palabras de afecto, hasta las conversaciones donde se juntan los abrazos, se encuentran las miradas y las sonrisas.
Además de su profesionalismo y de su excelente grupo de trabajo, recomendamos a LUA porque su mayor preocupación es que las mamás y parejas se sientan cómodas, porque entienden que este es nuestro nacimiento también, y que las decisiones tomadas son de común acuerdo y con cabeza fría. LUA se ha convertido en una extensión de nuestra familia y siempre las recordamos con cariño y agradecimiento.
Zoe, David & Sol
Parto en casa Bogotá
Junio 2022